Meteoroteca

Manuel Palomares Calderón
Febrero de 2010
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El eclipse total de sol del 30 de agosto de 1905 fue un verdadero acontecimiento social que atrajo el interés de la comunidad científica. España fue el único país europeo donde hubo ocultación total, en una franja que atravesaba la Península entre Asturias y Castellón. Con tal motivo, se prepararon y efectuaron numerosas actividades de observación con participación de científicos de varios países. El entonces Servicio Militar de Aerostación se implicó decididamente en el evento y preparó la ascensión de tres globos en Burgos, una de las ciudades donde el eclipse sería total. En el artículo se relata la ascensión que en uno de ellos –el Urano– efectuó el por aquel entonces Director del Instituto Central Meteorológico, Augusto Arcimis, junto al militar Alfredo Kindelán.