Meteoroteca

Josep Batlló
Boletín de la AME (Asociación Meteorológica Española) nº 40; 5ª etapa (Abril de 2013); pp. 32-36
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Ya desde 1856 existía en España una normativa para encauzar las observaciones y los estudios meteorológicos, primero a través de la Comisión Estadística del Reino y más tarde del Observatorio Astronómico de Madrid. Los trabajos llevados a cabo por ambas instituciones estuvieron dirigidos a los aspectos climáticos, nunca a la previsión del tiempo. En 1887 se crea el Instituto Central Meteorológico con ese objetivo, pero este no fue el primer servicio español que cumplió dicho cometido. Tres años antes, en 1884, se fundó en Filipinas –entonces colonia española- el Servicio Meteorológico de la isla de Luzón, con el Observatorio de Manila como principal estandarte.