Francisco Andújar Castillo
Revista del Centro de Estudios Históricos de Granda y su Reino, nº 3 (1989); pp. 253-270
La popularización del consumo de nieve en la España del siglo XVI, condujo al desarrollo de una actividad humana, característica de las montañas, desaparecida hoy. Almería se abasteció durante la época moderna desde pozos situados en Sierra de Gádor, pertenecientes a los bienes propios de la ciudad. En un medio tan árido como el sureste peninsular, disponer de nieve durante los meses estivales supuso el desarrollo de complejas técnicas de almacenamiento y transporte. Su comercio transcendió el ámbito local al difundirse su consumo en el siglo XVIII, momento en que llegó a ser exportada al norte de África. El consumo de nieve se convirtió en un elemento imprescindible para las poblaciones tanto por su uso terapéutico como, posteriormente, formando parte de la alimentación en los periodos más calurosos.